Nieve, llueva o truene. No hay fenómeno meteorológico que frene el trabajo diario de los viticultores de Cariñena. Cuidan y miman cada viña como si fuera única. El resultado de este duro y constante esfuerzo es un vino incomparable. Las piedras son un elemento inerte y más bien incómodo, pero estos trabajadores han conseguido sacar el mejor sabor de lo que parecía un inconveniente y convertirlo en el factor de su éxito. Una tierra pedregosa, pero plagada de vida, de viñas y de grandes historias.
Esta es la esencia de la campaña El Vino de las Piedras de la Denominación de Origen Protegida Cariñena, con la que el Consejo Regulador demuestra que el buen vino puede emanar del lugar más inesperado. ¿Cómo a partir de unas tierras pedregosas se pueden elaborar unos de los mejores vinos del mundo? De esta pregunta nace «El Vino de las Piedras», un mensaje que refleja la vida de un territorio dedicado a la tierra y al vino.
El Vino de las Piedras nace en un entorno agreste, en un territorio dedicado a la viticultura desde tiempos remotos. En Cariñena, los terrenos y las altitudes se entremezclan dando al paisaje una gran variedad de olores y colores. Sin embargo, las piedras no faltan en ningún escenario y obligan a las viñas a sobrevivir en condiciones casi extremas. El resultado son uvas más concentradas e intensas, y mucho más aromáticas que las que se cultivan en otras tierras. He aquí el secreto mejor guardado de la Denominación de Origen Protegida Cariñena: sus piedras, sus campos, su entorno y la dedicación de un territorio que vive por y para la tierra. Con peculiaridades únicas en el mundo, como dar nombre a una variedad de uva: Cariñena. Una variedad autóctona como también lo es la garnacha, que encandila en la actualidad a medio mundo.
La exitosa campaña de promoción puesta en marcha en 2011 muestra esa realidad de los 14 municipios que componen nuestra Denominación. Además de en poéticos spots, ha tomado forma desde entonces en iniciativas gastronómicas, culturales y enoturísticas con las que se ha multiplicado la presencia de la Denominación. El Salón, la Ruta de Verano o Descubre las Sorpresas de El Vino de las Piedras son algunas de ellas.
Pero en Cariñena se mantienen además tradiciones como la Fiesta de la Vendimia, que coincidiendo con su 50ª edición, fue declarada Fiesta de Interés Turístico de Aragón por el Gobierno autonómico. El encendido de la Fuente de la Mora, de la que manan miles de litros de vino durante todo un fin de semana, es una singular iniciativa -complementada en los últimos años por el «Paseo de las Estrellas«- que ha tenido como invitados de honor a personalidades como los Reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía -en 2008, cerrando los actos de nuestro 75 aniversario-, Vicente del Bosque -apenas un mes después de ganar el Mundial de fútbol-, Elvira Lindo o David Trueba.